viernes, 8 de febrero de 2013

DISCIPULADO. LUCAS



Lucas relata la llamada de los discípulos por Jesús de forma diferente a los otros evangelistas, intenta explicar por qué los discípulos siguen a Jesús.
Coloca primero el sermón. Jesús predica a las gentes desde la barca sus enseñanzas. Pedro ve el contenido de la palabra de Jesús que le llena de asombro, luego cuando Jesús le dice que vaya mar adentro y eche las redes, Pedro las echa por su palabra.
Al ver la pesca, Pedro aún se llena más de asombro, y es entonces cuando Jesús le dice que le siga y que será pescador de hombres.
Ese cambio de Pedro está motivado por la acción de Jesús.
Jesús le pide a Pedro algo imposible, y Pedro confía en Jesús para su misión, porque se fía de su palabra y porque ve la autoridad que tiene sobre las cosas.
La misión que nos manda el Señor siempre es imposible. Pero imposible para nuestras fuerzas, con su fuerza sí que podemos.
El seguimiento de Jesús no es una decisión tomada a ciegas por los discípulos, sino tras ver un fundamento, una prueba.
Jesús no puede contar a sus discípulos su misterio de golpe, por eso primero hace milagros, luego explica, para que se interesen y pregunten más a fondo.
Jesús probablemente pensó que estando juntos en Galilea, los discípulos estarían enseñados y tendrían una idea de lo que él quería hacer, pero se da cuenta que no se han enterado de nada y les reprende (Lc 9,55), y a partir de ahí comienza una enseñanza intensiva, pues quiere que sus discípulos abran su mente a lo que les quiere enseñar para que luego lo transmitan.
El camino de Jesús con los discípulos desde Galilea a Jerusalén lo aprovecha para enseñarles y dejarlos preparados.
Jesús les da una lección sobre el mandamiento principal, les enseña a rezar y les da el Padrenuestro, les habla en parábolas.
Los discípulos con eso debían haber aprendido ya quien es Jesús, pero no lo han hecho, no se han dado cuenta de la condición divina de Jesús y tampoco conocen cual es su misión.
Y esa misión se perderá si los discípulos no la entienden y la pueden contar.
El misterio de Jesús, se lo acaba de explicar en la última cena. Pero hasta que no llegue el Espíritu Santo no acabarán de comprender y darse cuenta de todo.
El desarrollo teológico se desarrollará después de la pascua, pero se fundamenta en todo lo que Jesús hizo y dijo antes de la pascua.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario